Poetas con Luz Ambiente, Eugenio Arce

“La  poesía, para mí, es una de las muchas razones que nos ofrece la vida para hacerla más llevadera. Es mi “hilo de Ariadna” en el laberinto del mundo“

Lo mismo me podría aplicar para definir la fotografía, y aún, si profundizo más en esa cueva; la luz es, la herramienta necesaria para asegurar dicho hilo.

Al igual que en otros retratos del proyecto, con Eugenio hemos recorrido varias estancias de su casa, en donde le dedica el tiempo a su proceso creativo.

Elijo la entrada de luz de la cristalera del salón, suavizada con “el modificador” de las cortinas y a contraluz de él.

Con “el contra”, trato de perfilar en “el lienzo” del rostro de Eugenio, unas determinadas características que detecto.

Detecto, que es una persona sencilla, de trato agradable y sosegado, de rasgos muy definidos… con estos sumandos, me planteo la solución del retrato, que, estableciendo un símil, no es más, que el resultado de una adición.

Eugenio Arce Lérida

La  poesía, para mí, es una de las muchas razones que nos ofrece la vida para hacerla más llevadera. Es mi “hilo de Ariadna” en el laberinto del mundo (no por casualidad uno de mis libros publicados se llama así). Tiene, también, otras vertientes. Una de ellas es que me sirve como instrumento para comunicarme con otras personas. Para eso es necesario que lo que escribo sea leído. Si le gusta al lector “miel sobre hojuelas”, que dice el refrán; si no, al menos habré intentado establecer un vínculo sutil. Igualmente, la poesía la utilizo para dialogar conmigo mismo por la posibilidad que tiene de expresar, con  las palabras adecuadas, el encanto de lo que es sin ser percibido y de lo que intuimos sin poder encontrar la oralidad necesaria para explicarlo. Creo que hay varias facetas que definen mi poesía: el compromiso social, la meditación poética sobre la vida, ensalzar la belleza, el amor, los valores humanos, también los conflictos interpersonales…; todo ello con la intención de que se me entienda. No reniego del esteticismo ni del culturalismo ni de otros “ismos” que han contribuido a la renovación del hecho poético, siempre que haya claridad en el mensaje y no se caiga en el prosaísmo que tanto abunda. Por lo tanto, huyo de la poesía hermética y oscura, aquella que al terminar de leer el poema el lector no sabe qué ha pretendido comunicar el poeta; creo que en nada favorece a la poesía como creación artística. No hay nada nuevo bajo el sol, pero siempre intento expresar los grandes temas y enigmas del cotidiano vivir bajo mi propio punto de vista (mi voz poética) y eso, crear un poema, añadir algo que no existía, creo que es mi pequeña contribución al devenir de la existencia, la mía y la de quienes me lean.